Sus bocas sueltan anillos de chocolate
Hasta empalagarse de su mismo festín berreta
Y aplauden los guantes, se relamen las perlas
Se relamen las orillas de sus playas serviciales.
Y en un fondo muy acústico
Suenan gritos de euforia
Fue él, fue él, fue él.
Inferioridad que sirve para lo mismo:
Delantal al suelo, la bandeja de plata
Zapatos ordinarios, a nada le das bola.
Sus dedos sueltan gotas de colonia y caramelo
Hasta intoxicarse de presiones ignorantes
Y afilan los guantes, se flexionan las piernas
Se flexionan mandíbulas en expresiones de cóctel.
Y tras el biombo de la angustia
Cuelgan trapos sin lavar
Fue él, fue él a ella.
Discriminación que iguala la balanza:
Jabón al suelo, el balde de plata
Perfume con el viento, se evapora la inmoral
Y desapareció.
Y acá no pasó nada.
Me gusta muchisimo lo que escribís (: las veces que pasé por acá quise comentar, pero nunca vi un link para hacerlo. Siempre estuvo y no me di cuenta?
ResponderEliminarNO! no restrinjas los comentarios nuevamente u.u dejarme a mi molestarte jajaja
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