19.2.15

el verano

un cubo desde el punto de fuga, costados de pan lactal duro, espejo triangular y las mostacillas, un sorbo de bebida efervescente, crayones robados, las sombras que hacen las jaulas en diagonal, ladrillos planos, cascaritas arrancadas, pasacalles caídos, gente mayor, gente menor, gente neutral

traigo un viento que todo lo seca pero no traigo frío, traigo
amor

mi cuarto me da ganas de llorar, y sí
pero los árboles también
cuando cae el sol
cuando se levanta
cuando se entibia el agua de las piletas que se ven desde las terrazas

traigo un viento que todo lo seca, sobretodo mis lágrimas

el sol brilla fuerte a través de sombras solitarias
¿acaso no ves que sólo te traigo... amor; sin importar lo que parezca?

dulce Diane, tu voz se quiebra hermoso
dejá que mi viento te agrande las cuerdas vocales
y te prolongue las notas
yo también,
todo lo que traigo
es amor

el verde me dejó huecos de bordes oscuros
para acuarelar
ese árbol atrae por sí solo,
nubes blancas que se abren
flores desérticas, cardones, ripio
la piedrita que resbaló de mi suela
los kilómetros lejos de casa
y de pronto ahogarse
en la cotidianidad

pero qué linda es
la mía

así y todo yo me volví una gelatina roja, brillante
una fuente de agua que según el día, el color
y el negro ya no me hace mal,
el negro es sensualidad, satén, encajes

estuve allá arriba y estuve excelente
rendí lo que pude, lo hice todo como pude
y llegué

los pies que van adelante mío,
caminando las rocas, la tierra
cada paso me da seguridad
para seguir avanzando
y agarrame la mano, pisá acá, allá y un saltito
no importa que se salpique un poco la vida
los pies que van atrás mío,
mis amigos, todos, sus caras, sus voces

me abrí el cráneo y entraron pájaros, vientos rosados y algunas flores
y ponele que unas manos ásperas me lo cosieron de vuelta
extrañé la curva del tuyo, la curva de tu cervical
pero ya que estamos, extrañé todos tus huesos
y la piel, el pelo, la carne, etc

también crecí, un poco

caminar

ah, y la lluvia
estar bien
estar tan bien