17.9.12

La cosa

...y uno entonces no puede parar, no quiere parar, no sabe cómo.

La cosa es clara cuando el regreso es difuso. Cuando el regreso no es regreso y la difusión es la migraña; la cruz a cuestas, la... todo eso. Caminar un poco lejos de lo que hace mal y creer que uno se acerca a lo que está bien, a lo que apacigua y relaja los músculos. Es el vudú a la lucha, que desperezarse le lastime, le... todo eso.
La cosa es clara cuando la permanencia es difusa. Cuando la permanencia es efímera y la difusión es el llanto; la soledad y la angustia posteriores. Correr bastante cerca de lo que hace bien y creer que uno se aleja de lo que está mal, lo que desgarra y atrofia el espíritu. Es el sencillo repetido, que estar ahí lo haga durar, que se quede, que... todo eso.
Porque la cercanía de las bocas, la rareza vuelta óleo, la necesidad de adherirse y no separarse nunca más.
La cosa es clara, difusamente clara.
El día que apareciste en mi vida... se volvió un efemérides.

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